Publicado el 28/2/2025, 12:29:47 | Autor: Un cibernauta milenario
La Fórmula 1 ha vivido incidentes de todo tipo. Motores explotando, coches volando, mecánicos haciendo malabares con neumáticos y hasta estrategias que parecen sacadas de una sitcom. Pero lo que pasó en el circuito de Sakhir durante los test de pretemporada es algo que merece un puesto de honor en la galería de los momentos más absurdos del automovilismo 🚦.
Cuando en Fórmula 1 se saca una bandera roja, lo lógico es pensar que alguien se ha salido de pista, ha estampado el coche contra el muro o que el coche de seguridad ha decidido tomar un atajo por el desierto. Pero esta vez, la historia fue diferente. Unos cristales aparecieron esparcidos en la recta principal, lo que obligó a detener la sesión. Los pilotos miraban a su alrededor, esperando encontrar el origen del desastre. Pero lo mejor estaba por venir 🏎️.
Resulta que los cristales no venían de un coche, sino de un lugar mucho más sorprendente: la cabina de Dirección de Carrera. Sí, ese lugar donde se toman decisiones cruciales y donde, al parecer, las ventanas explotan sin previo aviso. Nadie sabe qué pasó, solo que en un momento estaba todo en su sitio y al siguiente, el suelo del circuito parecía una cristalería después de un terremoto 🏁.
Los mecánicos miraban a los operarios con escobas como quien ve a alguien intentando limpiar la arena del desierto con un recogedor
Como si se tratara de una escena de una película de humor, la acción en pista se detuvo mientras un grupo de operarios armados con escobas se lanzaba a la heroica misión de limpiar la recta principal. Porque claro, lo único peor que un neumático destrozado es un cristal en mitad de la trazada. Se vivieron momentos de alta tensión en los que los barrenderos fueron, por un rato, los protagonistas de la Fórmula 1 🧹.
Este no fue el único imprevisto de la pretemporada. Entre los grandes momentos del test en Sakhir, se pueden destacar:
Así que, en resumen, la pretemporada de Fórmula 1 en 2025 ha sido un espectáculo de situaciones insólitas que ni los guionistas más creativos podrían haber planeado.
Después de este insólito suceso, hay algunas lecciones que la Fórmula 1 debería considerar:
Así que, mientras los equipos siguen ajustando sus monoplazas y los pilotos esperan el inicio de la temporada, el circuito de Sakhir puede presumir de haber sido testigo de la bandera roja más surrealista de la historia. Y si algo está claro, es que en la Fórmula 1, cualquier cosa puede pasar... incluso que el mayor problema del día no sea la velocidad, sino los cristales rotos 🏎️.