Publicado el 30-01-2025 | Autor: Un cibernauta milenario
En un contexto de creciente preocupación por la seguridad y la migración, el canciller alemán, Olaf Scholz, ha defendido el derecho a solicitar asilo en Alemania, rechazando las propuestas de los partidos conservadores, como la CDU-CSU, que buscan endurecer las normativas migratorias. Este debate se intensificó tras una serie de ataques mortales perpetrados por individuos llegados al país, como el caso de un afgano de 28 años que atacó a un grupo de niños con un cuchillo, lo que generó una gran conmoción en la opinión pública.
Scholz, al inicio de un acalorado debate en la Cámara Baja alemana, explicó que aunque comprende el enojo de quienes piden el cierre de fronteras, hacerlo significaría un grave incumplimiento de las leyes europeas y pondría a Alemania en la misma posición que Hungría, un país que ha sido criticado por sus políticas antiinmigración. Según el canciller, esto dañaría la unidad dentro de la Unión Europea y afectaría negativamente a la solidaridad entre los Estados miembros.
La CDU-CSU presentó dos propuestas que, aunque no vinculantes, han tenido un fuerte impacto político. La primera busca reducir la migración mediante controles fronterizos más estrictos y el rechazo de cualquier intento de entrada ilegal, incluyendo a los solicitantes de asilo. La segunda propuesta se centra en acelerar las deportaciones, permitiendo detenciones indefinidas en espera de expulsión para personas peligrosas o delincuentes.
Scholz calificó estas propuestas de "populistas" y advirtió que serían fácilmente bloqueadas por los tribunales alemanes, además de que la justicia europea tampoco las refrendaría. En su intervención, destacó que la erosión del Estado de derecho sería un golpe fatal para la estabilidad de Alemania y de la UE.
El canciller también recalcó la importancia de mantener la unidad dentro de la Unión Europea, especialmente en un contexto de creciente incertidumbre mundial, con figuras como Donald Trump influyendo en las políticas de otros países. Scholz hizo hincapié en que cualquier retirada de las normas europeas podría dar pie a que otros Estados miembros sigan el mismo camino, lo que pondría en peligro la cohesión de Europa.
Con las elecciones anticipadas programadas para el 23 de febrero, Scholz ha abogado por implementar el Pacto europeo de Migración y Asilo, una iniciativa para armonizar las políticas migratorias en Europa. Aunque las propuestas conservadoras no avanzarán por el momento, el canciller ha hecho un llamado urgente a legislar antes de los comicios, para garantizar que las políticas nacionales estén alineadas con los acuerdos europeos.
"La erosión del Estado de derecho destruye la confianza y la estabilidad", afirmó Scholz, destacando los peligros de las propuestas conservadoras.
El debate sobre el asilo y la seguridad en Alemania no solo refleja las tensiones internas en el país, sino también las dificultades de la Unión Europea para gestionar cuestiones migratorias en tiempos de incertidumbre. Aunque las propuestas más drásticas no prosperarán, la discusión sigue siendo un tema central en la política alemana y europea, y su resolución tendrá implicaciones significativas para la solidaridad europea y la seguridad en el continente.