Publicado el 01-02-2025 | Autor: Un cibernauta milenario
Ah, Venezuela... esa tierra llena de emocionantes sorpresas. Esta vez, el presidente Nicolás Maduro se ha reunido con Richard Grenell, el enviado especial de Donald Trump. ¿El motivo? ¡Crear una agenda cero! Porque, claro, nada como empezar de cero cuando tus relaciones diplomáticas con Estados Unidos están más congeladas que una pizza olvidada en el congelador 🍕🥶.
Maduro, quien por alguna razón sigue siendo presidente de Venezuela a pesar de ser ignorado por todo el mundo (incluido, por supuesto, Estados Unidos), decidió que ya era hora de afinar detalles con Washington. ¡Es hora de un nuevo comienzo!, proclamó. ¿Nuevo comienzo? Más bien, parecía más bien un intento de encontrar algo que no huela a catástrofe internacional 🧐.
De todas maneras, Maduro, con su cara de yo no he sido, propuso lo que él llamó una agenda cero. ¿Qué incluye esta agenda? Pues, más o menos lo que todo el mundo pensaba: deportar a los venezolanos que han escapado a Estados Unidos, y liberar a los pobrecitos ciudadanos estadounidenses que están detenidos en cárceles venezolanas. Como si ser detenido en Venezuela fuera el último resort de las vacaciones, claro 🏝️.
Desde el despacho presidencial de la Casa Blanca, Trump, que ni de broma reconoció a Maduro como presidente (porque, bueno, ¿quién lo haría? 🤷♂️), tiene algunas expectativas claras sobre este asunto. ¡Sí, muy claras! Le encantaría que Maduro aceptara devolver a todos los criminales venezolanos que se fueron a EE.UU. y a sus pandillas, ¡y todo esto sin hacer un solo truco de magia! 🤹♂️
¿Quién necesita una agenda diplomática cuando puedes simplemente intercambiar criminales como si fueran cartas del Uno? Los rehenes estadounidenses también deben ser liberados de inmediato, según el deseo de Trump. ¿Qué podría salir mal con semejante propuesta? 😅
El presidente del Parlamento venezolano, Jorge Rodríguez, estaba presente para representar al mandatario en la charla histórica, aunque uno no puede evitar preguntarse: ¿estaba allí para negociar o para asegurarse de que nadie rompiera la exquisita tensión diplomática? 🤔
“Este es un momento histórico para la diplomacia bolivariana”, proclamó VTV, como si Venezuela hubiera ganado la Copa Mundial de Fútbol por fin. 🚀
En teoría, sí. Los dos países deberían reanudar los vuelos de deportación, esos que desaparecieron con la ruptura diplomática de 2019. El gobierno de Biden casi logró ponerlos en marcha, pero ya saben cómo es eso de las relaciones internacionales: algo tan volátil como la confianza en una taza de café ☕. El problema sigue siendo la falta de acuerdos firmes y las promesas que se diluyen más rápido que un helado en pleno Caracas 🥶🍦.
Trump, como siempre, tiene algo que decir sobre el petróleo de Venezuela. Si Biden pensó que levantar las sanciones era una buena idea, Trump tiene otro plan: no dejar que ni un barril de petróleo venezolano cruce las fronteras. ¡Eso sí que es ser contundente! 🤡 Trump no quiere que vuelva a repetirse la "estupidez" de comprar petróleo de Venezuela, a pesar de que la última vez que alguien intentó hacerlo, todo terminó como una película de terror de bajo presupuesto 🎬.
Al final, nadie sabe si este encuentro histórico traerá algo positivo o si solo fue otra excusa para hacer una foto bonita en la que todos puedan sonreír de manera incómoda 😬📸. ¡Solo el tiempo dirá!