El camino hacia las estrellas es la historia de Sara García Alonso

Publicado el 26-01-2025 | Autor: Un cibernauta milenario

Sara García Alonso astronauta

En un mundo donde las redes sociales ejercen una fuerte presión sobre las personas, especialmente sobre los menores, es común ver cómo muchos jóvenes sufren acoso por no cumplir con los estándares de belleza que la sociedad considera "perfectos". Estos niños y niñas necesitan aprender a relativizar las críticas y compartir sus experiencias con otras personas, ya que esto les ayuda a poner en perspectiva los comentarios dañinos y a ver que no son tan importantes.

La infancia de una mujer extraordinaria

Sara García Alonso, actual investigadora en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y astronauta de reserva en la Agencia Espacial Europea (ESA), vivió en su infancia situaciones similares. Aunque hoy es un referente en ciencia y exploración espacial, cuando era niña sufrió burlas y agresiones por parte de otros niños, como cuando le lanzaban la pelota de fútbol a la cabeza mientras la llamaban "gorda". Según ella misma señaló, lo que realmente le dolía no era el balonazo, sino las palabras de los demás.

Cómo superar los obstáculos de la vida

La vida de Sara estuvo llena de desafíos. Desde pequeña, enfrentó problemas de timidez patológica, pero con el tiempo logró superar esta barrera. En su libro *Órbitas*, describe su camino, marcado por la curiosidad y la determinación. Este libro combina autobiografía, ensayo y ficción para contar cómo la ciencia, la música y las experiencias vitales, como el paracaidismo, han sido elementos clave en su desarrollo personal.

Según Sara, lo importante no es evitar los obstáculos, sino aprender de ellos. A lo largo de su vida, se ha enfrentado a cada dificultad con tesón, disciplina y dedicación diaria, entendiendo que no existe una fórmula mágica, pero que siempre es posible superar los retos con trabajo constante.

Las seis órbitas de su vida

El libro de Sara García Alonso se estructura en seis capítulos, llamados "órbitas", que representan diferentes trayectorias en su vida. Cada órbita es un viaje lleno de aprendizajes y lecciones. Algunas de estas órbitas incluyen experiencias tan variadas como campamentos militares, submarinismo, krav maga, pero también deportes, música y el legado familiar.

Aunque nunca había considerado la posibilidad de convertirse en astronauta, en 2021 vio una oferta de la ESA que coincidía con su perfil y decidió enviar su currículum. Casi dos años después, Sara se convirtió en la primera astronauta española de la historia, superando rigurosas pruebas psicológicas, físicas y entrevistas.

La experiencia como astronauta

Uno de los mayores retos durante el proceso de selección fue soportar la presión psicológica y gestionar la incertidumbre. Estos desafíos no desaparecieron después de ser seleccionada. A pesar de todo, Sara sigue siendo optimista y espera poder participar en una misión científica que involucre proyectos de investigación de centros españoles, con el objetivo de avanzar en terapias médicas y en el conocimiento científico.

"En el sector espacial, la cooperación internacional es clave. La Estación Espacial Internacional ha demostrado que es posible colaborar entre diferentes agencias, y eso es fundamental para el futuro de la exploración espacial".

Sara García Alonso astronauta

La importancia de la colaboración en el espacio

En cuanto a las relaciones internacionales en el ámbito espacial, Sara García Alonso también mostró su optimismo frente a los cambios políticos. Aunque el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos podría alterar las relaciones entre la NASA y otras agencias espaciales, la cooperación internacional sigue siendo esencial para el futuro del sector.

Para Sara, lo fundamental es que existan agencias públicas capaces de regular el acceso al espacio, establecer normas sobre la explotación de recursos y gestionar los residuos espaciales. Las agencias deben ser las encargadas de establecer reglas claras sobre la utilización del espacio exterior, ya que el sector privado no puede encargarse de todo. Sin embargo, también es positivo que haya una colaboración público-privada, como la que existe con empresas como SpaceX y Blue Origin, que hacen grandes inversiones en la tecnología espacial.

El futuro del espacio

Con su mirada puesta en el futuro, Sara García Alonso sigue trabajando para contribuir al avance de la ciencia y la tecnología, especialmente en el campo de la investigación espacial. A pesar de los desafíos y la complejidad del sector, su perseverancia y su pasión por el conocimiento siguen siendo sus principales motores.