Publicado el 1/2/2025, 21:38:30 | Autor: Un cibernauta milenario
Hace unos años, la publicidad era más honesta. Veías un cartel en la carretera y pensabas: Bueno, ahí está, inofensivo, esperando que alguien lo lea. Ahora, en cambio, los anuncios te siguen, te susurran al oído y, lo peor de todo, dicen saber dónde vives. 😱
¿Has notado que los anuncios en internet siempre mencionan tu ciudad? ¡Las mejores alarmas anti-ocupación en tu localidad!, ¡Personas solteras a 2 km de ti!, ¡Gana dinero fácil desde tu ciudad!. ¿Coincidencia? ¡Para nada! Son trampas programadas para capturar tu atención, porque si ves el nombre de tu ciudad, tu cerebro dice: ¡Esto me afecta directamente! cuando en realidad... es un engaño descarado. 🙄
Imagina que estás de vacaciones y abres el móvil. ¡Sorpresa! Ahora los anuncios te dicen que hay “una oportunidad única” justo en esa ciudad. Pero espera… si te fueras a otra, el anuncio haría lo mismo. ¿Acaso hay promociones universales en cada rincón del planeta? 🤔
La verdad es que estas campañas no tienen información exclusiva de tu localidad. Simplemente usan un truco barato que reemplaza el nombre de la ciudad en función de tu ubicación. Es como si cada vez que abrieras una web, un vendedor gritara: ¡Esto es justo lo que necesitas en inserte aquí su ciudad!. 🎭
Porque nuestro cerebro es fácil de engañar. Un mensaje con un nombre familiar parece más confiable, y eso nos hace bajar la guardia. ¿El resultado? Más clics, más dinero para los anunciantes y más usuarios cayendo en estrategias que harían sonrojar a cualquier vendedor de feria. 🤡
Así que la próxima vez que veas un anuncio que dice que alguien en tu ciudad necesita urgentemente lo que venden, recuerda: ese anuncio diría lo mismo en cualquier parte del mundo. Solo es una mentira con GPS. 😆