Publicado el 12/2/2025, 15:43:02 | Autor: Un cibernauta milenario
Las peleas entre magnates tecnológicos han alcanzado un nivel que ni en las mejores telenovelas. Elon Musk y Sam Altman, dos de los nombres más importantes en el mundo de la inteligencia artificial, están en plena guerra de egos. Y como en todo buen conflicto de millonarios, el dinero no es problema, pero sí lo son los tweets y las indirectas en entrevistas. Ahora, Musk ha decidido lanzar una OPA hostil para comprar OpenAI, y Altman ha respondido con la misma sutileza que un puñetazo en la cara 🤜💥.
Todo comenzó en 2018, cuando Elon Musk decidió abandonar OpenAI porque, según él, la empresa no iba en la dirección que él quería. Es decir, no hacía lo que él decía. Desde entonces, Musk ha estado obsesionado con OpenAI como quien no supera a su ex y sigue revisando sus redes sociales.
Pero no se quedó solo en la nostalgia. Desde hace años ha intentado recuperar el control de la empresa, primero con demandas, luego con acusaciones públicas y ahora con una oferta de compra por 97.400 millones de dólares. Porque cuando alguien no te responde los mensajes, la solución lógica es intentar comprar su empresa 💰.
Altman, que ya está cansado de los ataques de Musk, ha optado por el camino del sarcasmo. En respuesta a la OPA hostil, comentó en tono burlón: No, gracias, pero compraremos Twitter por 9.740 millones si quieres. En referencia, claro, al hecho de que Musk compró X (antes Twitter) por 44.000 millones y desde entonces su valor ha caído en picado 📉.
Musk, con su diplomacia habitual, respondió con un elegante Estafador Sam. Todo muy adulto y profesional.
En una reciente entrevista, Altman insinuó que Musk en realidad no quiere comprar OpenAI, sino simplemente impedir que siga creciendo. Según él, Musk está desesperado por no quedarse atrás en la carrera de la inteligencia artificial y haría lo que fuera para frenarlos.
Probablemente toda su vida sea desde una posición de inseguridad. Lo siento por él
Una frase con más veneno que una telenovela mexicana 🎭.
Durante años, Altman había intentado mantener las formas y reconocía públicamente la importancia de Musk en los inicios de OpenAI. Pero parece que la paciencia tiene un límite, y Altman ya no está dispuesto a aguantar más. Ahora lo llama matón y le recuerda que no todo gira a su alrededor.
La verdadera razón del enfado de Musk podría ser el Proyecto Stargate, el nuevo centro de datos de OpenAI, que promete revolucionar la industria de la inteligencia artificial. Musk, al verse relegado a un segundo plano, volvió a atacar, asegurando que Altman no tiene el dinero para llevar a cabo el proyecto.
Altman, con la paciencia agotada, le respondió con una invitación sarcástica: Puedes venir a visitar el centro de datos cuando quieras. Básicamente, le está diciendo Mira cómo lo hago sin ti 😏.
Esta historia está lejos de terminar. Musk sigue empeñado en recuperar OpenAI, mientras Altman está cada vez más seguro de que no necesita a Musk para seguir avanzando. Lo único seguro es que esta pelea de multimillonarios con egos frágiles nos seguirá dando momentos gloriosos.
Y quién sabe, quizás en un futuro alguien haga una película sobre esta guerra de titanes. Solo esperemos que no la escriba una inteligencia artificial.